El asado se sirve con goles y alegría…
Nelson “Pipino” Cuevas, una leyenda del fútbol y del buen recibimiento, invita a hinchas de River a su casa en Paraguay, ¡como si fuera el Airbnb de los asadazos! Dice que su casa está más llena de huéspedes que un estadio en final de Copa. Las habitaciones no tienen jacuzzi, pero ofrecen parrillada de nivel olímpico. En un guiño al pasado, Pipino vuelve a ser el anfitrión de los argentinos, como cuando ayudó a De la Cruz y ahora con la ida de los octavos de final de la Libertadores ante Libertad.
Hombre agradecido, Pipino recuerda con cariño sus días en River y su rol de salvador en el banco, como un “abrelatas” futbolístico siempre listo para entrar. En una entrevista, elogia a Juanfer Quintero, comparándolo con un abrelatas de última generación que hace magia con el balón. Como un técnico que entra para destapar refrescos, Quintero podría destrabar cualquier partido cerrado. Mientras tanto, Pipino mejoró su golf al punto que piensa que podría vencer a Gallardo. Eso sí, solo si el partido es con palos y pelotitas.