Del banco de River a la MLS en un santiamén…
Matías Rojas, que acumuló más lesiones que un maniquí de tienda abandonada, terminó su corto ciclo en River Plate. Marcelo Gallardo hizo su propia limpieza de primavera, y Rojas, que parecía jugar más al escondido que al fútbol, decidió rescindir su contrato. En solo 147 minutos distribuidos en ocho partidos, convirtió un gol a Platense, pero eso no fue suficiente para asegurarle un lugar fijo. Ahora, el paraguayo cambiará el Monumental por los bosques de Portland, donde iniciará su segunda aventura en la MLS con los Timbers.
Rojas, que dejó un lugarcito en su valija para una camiseta 7 nueva, será el refuerzo que Portland esperan como si fuera la pizza perfecta. Los Timbers, que están sextos en la Conferencia Oeste y sueñan con los playoffs, quieren finalizar la temporada con una ofensiva a toda marcha. Con Phil Neville al mando y compañeros de equipo conocidos, Rojas aceptó la propuesta y se suma a una liga que ya le resulta familiar. Mientras tanto, su excompañero Manuel Lanzini sigue buscando destino, quizás eligiendo entre la MLS o el desafío de unir su carrera con su juego de PlayStation favorito.