El inusual apoyo a Armani desde el banquillo…

En River, a diferencia de Racing, no hubo necesidad de cambiar a Franco Armani en los penales. Mientras Gustavo Costas optó por sustituir a Arias en Racing, el equipo de Nuñez respaldó a Armani como si fuera el último trozo de pizza en la caja. Y vaya que no decepcionó: se convirtió en héroe a puro reflejo. En esta emotiva escena, Jeremías Ledesma fue el sidekick perfecto, repartiendo sonrisas desde el banquillo como si fueran confites en un cumpleaños de 5 años.

Ledesma, quien llegó durante el ciclo de Demichelis, supo adaptarse rápido al club. Aunque se quedó con las ganas de jugar más, frente a Godoy Cruz volvió al campo después de un siglo. Bueno, seis partidos con 540 minutos, que se sienten como un siglo si sos arquero suplente. Mientras aguarda su momento, sincroniza con Armani tan bien que podrían ser los “David Copperfield” y “Houdini” de Núñez, con sus movimientos de manos engañosos haciendo olvidar cualquier disputa de egos en el equipo.