González Pirez rompe la sequía del desayuno…
¡Se acabó el ayuno en River! Después de 101 días tan largos que Santa Claus pasó dos veces, el club de Núñez recordó que los goles también son para el primer tiempo. En pleno desayuno futbolero, Leandro González Pirez le dijo “basta” a una racha que ni mi abuela recordaba. Los hinchas ya empezaban a creer que había un hechizo del tipo “no tendrás gol antes de las 12”.
En Santiago del Estero, González Pirez se puso el delantal de chef de goles tempraneros y, a los 3 minutos, cocinó uno que dejó a Borja, Mastantuono, Tapia y hasta a Nacho Fernández mirándose y diciendo “¿en serio, Leandro?” El pobre Muñeco Gallardo, después de la fiesta de goles de diciembre, ya había empezado a pensar en contratar un brujo para espantar la mala suerte de las primeras mitades.
River venía como en una película de suspenso, enfrentando a más de diez equipos, todos esperando el gol del primer tiempo como un capítulo extra. Pero González Pirez, con su séptimo gol en 141 partidos, dijo “¡basta de comerse las uñas en los primeros 45!”, disolviendo la maldición y enviando a Gallardo a una meditación merecida antes de enfrentar la Copa Libertadores. ¡Que sigan cocinando goles tempraneros!