Gallardo y sus 11 malabaristas en el altiplano…
Marcelo ‘El Muñeco’ Gallardo está más complicado que un partido de truco con cartas marcadas. Arme que te arme, la selección de jugadores para enfrentar la altura de Quito es casi un rompecabezas del tamaño de un asado en una pizzería. ¡Y ni te cuento de la odisea aeroportuaria! River sale a dar la vuelta al mundo en 80 horas: Ezeiza, Guayaquil, Quito… ¡Ándale, que a ver si para el domingo llegan a casa y no a la Luna!
La tropa riverplatense tiene un desafío no menor: sobrevivir a 2.850 metros sobre el nivel del mar. Imaginate jugar al fútbol en el Everest, pero con menos nieve y más goles. Mientras tanto, Gallardo, como un maestro de ceremonias en el circo romano, ajusta cada tornillo de sus gladiadores. Revisar antecedentes médicos, evaluar energías y chequear el color de las medias. ¡No deja nada al azar el Napoleón del River Plate!
Pero ojo, que la Copa Libertadores no deja de ser la previa. Porque después de todo este circo itinerante, el Superclásico en el Monumental espera como el gran plato fuerte. ¿Será un duelo de titanes o un convite a la cama elástica? Ese anda siendo el partido que todos quieren ver, mientras Gallardo se pone a alinear los astros: Quito, Boca y ¡por qué no!, el universo entero.
