El Muñeco transforma a Mastantuono en un mago del balón…
Imaginen una mañana cualquiera en el Camp de River Plate. Marcelo Gallardo, con su confiable libreta de mago bajo el brazo, le estaba enseñando a un joven prodigio llamado Franco Mastantuono a dominar las artes oscuras… del tiro libre. Al estilo Gandalf con su varita, el Muñeco le mostraba a Franco cómo convertir cada pelota en un misil teledirigido al ángulo. Y no es chiste: ¡ni Harry Potter podría hacer un hechizo tan efectivo!
El domingo pasado, Mastantuono destapó la olla y sacó a relucir toda esta alquimia frente a Boca, lanzando un tiro libre que haría que cualquier pelota aspirase a una medalla olímpica. Claro, el muchacho de 17 años ya venía practicando desde los 14 a dejar al arquero con cara de “¿Y eso cómo lo hizo?” Mientras tanto, Gallardo desde el banco aplaudía como si estuviera viendo el circo del Sol en el Monumental: “¡Golazo, golazo!”, exclamó al ver la pelota entrar.
Ahora la simple palabra es “¡Venderlo!”, pero no se preocupen, que River aún trae la receta secreta del dulce de leche futbolero. Mastantuono es un pibe con los pies en el pasto, pero que levanta vuelo más que dron en el parque. Así que paciencia, que el tiempo de exportar magia al mundo aún no ha llegado. Y si se va, será con más espectáculo que la partida de un ilusionista en gira internacional. ¡River tiene su mago del balón y la platea está lista para las funciones!