Demichelis toma el celular y responde al ritmo de tango…
En una escena digna de un sketch de humor, Martín Demichelis, técnico de Rayados de Monterrey, decidió largar un speech sobre Rodolfo D’Onofrio, no porque alguien se lo pidió, sino porque el viento soplaba en esa dirección. Demichelis, sin que nadie lo arrincone en un córner, dijo: “Rodolfo me mandó dos mensajes que guardo bajo siete llaves, y, la verdad, con esos mensajes me voy hasta el fin del mundo… O hasta el próximo asado”. Sí, señores, el mundo del fútbol ahora se compone de mensajes de texto dignos de un novelón.
Parece que en el River Plate, donde antaño manejaron sus problemas futbolísticos como una comedia de enredos, ahora tienen estos altercados que parecen más un drama shakesperiano que un simple intercambio de opiniones. Rodolfo D’Onofrio, desde la comodidad de un streaming, despotricó cual flamante Casandra y calificó a Demichelis como un técnico con menos carisma que una papa hervida. Este último, luego de enterarse, murmura que los mensajes alegres de Rodolfo son como aquel gol en el minuto 90: inolvidables, pero poco frecuentes.
Mientras tanto, la expectativa es tal que parece que el complejo asunto se resolverá en una partida de truco entre River y Rayados en el Mundial de Clubes, donde no solo se disputa el balón, sino también se juega una especie de telenovela deportiva. En fin, la pelota sigue rodando y seguramente esta historia tendrá su capítulo siguiente, con más mensajes de WhatsApp y menos goles, ¡como siempre pasa en el fútbol!