Las urnas electrónicas y jóvenes al poder…
¡Atención, señoras y señores! River Plate se prepara para un show electoral digno de un episodio de Los Supersónicos. Las elecciones presidenciales están a la vuelta de la esquina y, por primera vez desde que existía el Aubló, los hinchas millonarios podrán votar de manera electrónica y convertir el Monumental en un holograma de alta tecnología. Imaginate, ¡votantes apretando botoncitos como si estuvieran jugando a la PlayStation mientras el semillero de promesas de la cantera les lleva mate y bizcochitos! Todo sea por la modernidad y porque ya nadie quiere mancharse los dedos de tinta.
Pero eso no es todo, amigos del fútbol: la emoción crece junto con la juventud, porque ahora los menores de 16 años serán jugadores en esta liga electoral. Imaginen un ejército de adolescentes con más entusiasmo que un penal en el último minuto decidiendo el futuro del club. Además, el nuevo Estatuto llega con más cambios que el vestido de gala de la Gala del Met: será imposible para cualquier presidente reelegirse, porque en River parece que les entró el bichito del cambio y ahora quieren un pie para cada canción.
En cuanto a los candidatos, Stéfano Di Carlo asoma como la ficha oficialista en esta partida de truco electoral, mientras Carlos Trillo va por la revancha con el estilo de un delantero que no se rinde. Antonio Caselli más que avanza, parece estar bailando la Macarena, porque su fórmula se desvanece sin Trezeguet, que se quedó sin nafta para estas elecciones. Y no faltan otros candidatos en la cancha: Daniel Kipper, Luis Belli y Pablo Lunati podrían aparecer en escena al mejor estilo “detrás de ti, imbécil”. River, el club que nunca duerme, promete una elección para recordar, con más sorpresas que un cumpleaños en el que aparece el payaso y el superhéroe al mismo tiempo.
