Franco Mastantuono: El Messi de Asunción…
River y Libertad tienen una relación más complicada que decidir qué pariente cocinará el asado del domingo. En sus 14 choques de telenovela, River ha salido más victorioso que un perro que por fin atrapa su propia cola, con una racha de victorias digna de un maratón de autobombos. Las estadísticas son como una ensalada de goles: nueve victorias, cuatro derrotas y un empate, que sería como el tomate que a nadie le gusta pero siempre está presente en la ensalada.
En el último partido, el astuto Mastantuono hizo un golón digno de una serie de Netflix. Este pibe de tan solo 17 años bailó samba en Asunción al anotar con su pie derecho, que usa menos que uno usa la camisa de su hermano mayor. Un gol tan inesperado como ver a tu abuela manejando un monopatín, coronó la victoria 2-1 del CARP apenas un suspiro antes de ser convocado a la Selección Mayor por Scaloni.
Ahora Mastantuono, a quien ya comparan con un velociraptor en dieta de Red Bull, se enfrenta a la gran montaña rusa de emociones con la Selección y el Mundial de Clubes. El pibe de Azul, más escondido que un buen vendedor de humo, tiene los ojos de medio mundo sobre él y, después de revolucionar el fútbol, se enfocará nuevamente en despeinar redes contra Libertad en los octavos, como quien vuelve al barrio después de un semestre en Hogwarts.