CR7 y las esferas misteriosas del fútbol argentino…
Imaginad esto: Cristiano Ronaldo, el hombre que desafía la gravedad con cada salto, planeando su llegada a la Argentina como si fuera un extraterrestre del fútbol. Resulta que, entre goles, posturas heroicas y un par de flexiones de bíceps, recibía mensajitos en su celular de un club argentino. Pero cuál, ¡ah, misterio, misterio! Boca o River, el dilema nacional del siglo, ahora también es galáctico.
El Comandante portugués, inmortalizado en figus y memes, confesó entre carcajadas en rueda de prensa que aún le falta una visita inscrita en su GPS: la de la tierra de los asados y el mate. “Tengo 40 años y más excusas que un equipo en descenso,” declaró. Pese a la desilusión de que no saltará el charco para vestir la albiceleste con turbo, no cerró la puerta a futuros mundiales tropicales en las pampas. ¡Pipí cucú, Cristiano!
Cristiano, entre risas, admitió tener cariño por Messi, el eterno rival que podría haber sido su asador designado en La Bombonera o el Monumental. Pelotas van, pelotas vienen, pero esto ya se convierte en una telenovela en la que el galán portugués promete visitar a su viejo rival en un futuro donde el balón podría tomar rumbo a la Argentina. Mientras tanto, Portugal y España jugarán su final de Nations League, sin tango, pero con sabor a mundial.
