¿CBU, Hablás mi idioma futbolero?…
¡Máxima alerta en el planeta fútbol! Resulta que entre Racing y el River de los corazones galopando, se vive un culebrón digno de novela de sobremesa. Racing está como el perro que se comió los deberes, y River esperando como en una película de suspenso que el CBU mágico haga su aparición antes de que el plazo expire y todo estalle en mil colores. ¡Esto es más picante que un clásico asado después del partido!
Mientras tanto, el glamuroso Marcelo Gallardo afila su teléfono más que un cuchillo durante el asado del domingo, rogando que Racing libere al pobre Maxi Salas del entramado burocrático. Si Racing sigue pisando el freno, la AFA se pondrá la capa de superhéroe con varita mágica y, ¡zas! conducirá los billetes para que caigan en el bolsillo adecuado como si fuera magia. Porque claro, cuando la AFA entra al juego, todo se vuelve un acto circense digno del Cirque du Soleil.
Maxi, un hombretón ansioso, espera con nervios de acero que ni el mundial de chinchón. A la espera de que todo esté firmadito y sellado, con la sonrisa del nene que va a debutar con la Banda ante Platense. Si Gallardo dice que sí, Salas podría aparecer más rápido en el Monumental que el meme de “¿qué mirás, bobo?”. ¡Preparen los pochoclos, porque esto se pone mejor que una comedia de enredos!