El Chino Martínez Quarta se suma a la racha…
En el entrenamiento de este miércoles, parecía que River estaba rodando una película de terror estilo “La Maldición de la Rodilla 2”. Mientras Marcelo “El Muñeco” Gallardo contaba los jugadores sanos con los dedos de una mano y le sobraban, se enteró de que nuestro querido Chino Martínez Quarta sintió como si un duende invisible le mordiera la rodilla derecha. Resulta que estos misteriosos seres también atacaron a Maximiliano Salas, ¡la rodilla es el nuevo terreno de guerra en el Monumental! Ahora le harán estudios a Quarta, aunque piensan que es solo un esguince, el clásico VIP de las lesiones.
Gallardo, con una lista de enfermería que ya parece la convocatoria a una fiesta, decide sacar del sombrero al ilustre Germán Pezzella, el defensor que estuvo hibernando como un oso panda esperando la primavera futbolera. Así es como Pezzella salta al escenario, listo para formar un dúo de miedo con Paulo Díaz. Mientras, el Muñeco cruza los dedos y los tacos para que el Chino no pierda el tren a la Copa Libertadores.
El Muñeco ahora tiene la misión imposible de cruzar los Andes en llama para llegar a Asunción el 14 de agosto, sin otro esguince más. La incertidumbre rodea al equipo sobre si el Chino estará recuperado para esa fecha o si tendrá que jugar con una pelota de playa en una pierna. Lo cierto es que con tanto esguince, en el Monumental ya están organizando el primer “Gran Esguince Open”, para ver si consiguen un trofeo de campeonato aunque sea en eso.
