Los hinchas de Racing en modo Bruce Willis…
Imaginate llegar al estadio y ver una bandera más grande que el ego de un delantero estrella: “¡Con Racing no se jode!”. Así se pronunciaron los hinchas académicos, mientras una mezcla de risas, llantos y pochoclos volaba en el aire como si estuvieras en la avant premiere de una película de acción de los ’90. Sí, todos creíamos que la estrella de la noche era la pelota… pero no, ¡fue el trapito rebelde colgado del alambrado!
La mega tela decía “¡Gracias Milito! ¡Gracias Gustavo!” dejando a todos con la intriga de si esos agradecimientos se debían a alguna dieta milagrosa o a quién sabe qué otro escándalo. Pero claro, aquí el secreto revelado es que nuestro querido Maxi Salas, el Messi del barrio pero con menos tecno en la cabeza, se nos escapa al River como aquel vecino que siempre se lleva el asado más jugoso. Los hinchas de Racing están más furiosos que un árbitro cuando ve llover en la final.
Para añadir más picante a la noticia, el vaivén de Salas deja a Racing con un sabor a milanesas sin papas fritas. ¡Y claro, el partido contra San Martín de San Juan fue todo un festival de emociones! Mientras los hinchas arengaban como si estuvieran en la batalla final contra los zombies, ¡la bandera se volvió un meme viviente del folklore futbolero! Vamos, que ahora entienden por qué dicen que con Racing no se jode. ¡La academia se respeta, señores!