Miguel Borja y el Exilio del Grito Sagrado…
Lucas Beltrán, que en sus días de Fiorentina debutó en el arte del “no gol” durante unos eternos diez partidos, se convirtió en el psicólogo amateur de su ex compañero Miguel Ángel Borja. Borja, conocido en el mundo del fútbol como “El Colibrí”, parece haber extraviado su GPS goleador y también sus botas de la suerte, mientras que River se pregunta si es necesario hacer un ritual para invocar a los goles que se fueron de vacaciones.
El pobre Borja lleva un mes entero sin saber lo que es enchufarla en la red, y su último lamento ocurrió el 22 de febrero. Sin embargo, el estratega Marcelo Gallardo, conocido por sus tácticas dignas de una partida de ajedrez, ha decidido invertir en una semana intensiva de reseteo de cabezas, esperando que Borja vuelva a ser “El Colibrí” y no “El Pingüino” del área.
Mientras tanto, los fanáticos de River ya se imaginan a Beltrán tomando el protagonismo en la película sobre su regreso triunfal. Sin embargo, Lucas parece más comprometido con sus aventuras europeas mientras declina amablemente los roles de delantero estrella, diciendo que volverá cuando las estrellas se alineen o cuando alguien en River olvide cerrar la puerta. ¡Eso sí, con el Mundial de Clubes a la vuelta de la esquina, la ansiedad escala a niveles cómicos!
