La fiebre de los contratos: ¡ni el oro basta!…
¡No te lo puedo creer! River instauró el “Club de los Millonarios” al armar un contrato tan caro que lanza centavos desde el Monumental hasta el Obelisco. Bautista Dadín, el pibe con un precio de etiqueta más alto que un auto deportivo europeo, firmó por unos módicos 100 millones de euros. ¡El peso de su contrato podría hundir la cancha de River! Solo faltaría que exija firmar con una pluma bañada en oro andino.
Pero esperen, que no se acaba ahí. Racing decidió que si River puede subirse al tren del despilfarro, ellos lo harán con un contrato tan insólito que hace que un BMW parezca una oferta de liquidación. Adrián “Maravilla” Martínez renovó por la módica suma que solo alcanzaría Jeff Bezos en un año de “ahorros”. ¡122 millones de euros por un delantero con más años que goles en el último torneo! Imaginen tratar de pagar eso: es más fácil convencer a Messi de jugar en el equipo del barrio.
Entre una guerra de cláusulas que parece salida de un episodio perdido de Los Simpsons, River se corona como el maestro del gasto. Boca intenta seguirle el ritmo, pero parece que a veces falla al estilo “Boca libre”, ¿quién necesita gastar cuando podés tener drama gratis? Al final, lo único seguro es que en este desenfreno económico, estos equipos parecen luchar por un récord Guinness por el contrato más loco. ¡El fútbol argentino siempre es una telenovela en la que la esperanza, el drama y la comedia no paran de sorprendernos!