Racing avanza y Costas se convierte en sabio futbolero…
Gustavo Costas, una mezcla de filósofo y técnico de Racing, soltó: “No cierro puertas y menos a un jugador que va tras el oro del Río de la Plata”. Luego de avanzar a octavos como rayo de la Copa Argentina, habló de Maxi Salas como quien cuenta la historia épica de un vikingazo en busca del galón de oro. “Racing es el más grande”, dijo, tanto que parece que Salas necesitará un GPS para llegar a River y no perderse en el camino.
Mientras el plantel de Racing celebraba como si hubieran encontrado al último orégano en la pizza del vestuario, Costas declaró que los hinchas parecían trompos en carnaval, desorientados por si el delantero seguía o no. El pobre Maxi Salas ha sido el protagonista de lo que podría ser la próxima telenovela de prime time, con un toque de “se fue, no se fue… vence la cláusula, ¡aja! parece novela turca”. Sin embargo, Costas expresó que “el sueño de todos” es meterse en la Libertadores cual Indiana Jones buscando el Santo Grial.
Para cerrar, se puso firme como sopa de cemento y arengó al plantel como si fuera el mismísimo Leónidas en Termópilas: “Estamos mejor que todos. No me meto en este puterío, ¡vamos a ganar todo menos el Bingo del barrio!”. Pasándola de lujo en el rectángulo de gloria, están decididos a encadenar triunfos y mucho chamuyo antes de los partidos. ¡Vamos la Academia! ¡A seguir latiendo el corazón racinguista de su hinchada por todos los rincones, hasta en los asados de Paraguay y Río!
