Entre River y Boca, ¡Menudo fiestón en el Camp!…

¡Ay, Bautista Dadín! Este delantero de la Reserva de River nos ofrece un espectáculo tan épico que hace que el circo de tres pistas parezca aburrido. Su golazo del 21 de mayo de 2025 fue digno de un pintoresco musical de Broadway, dejando a Boca desorientado y aplaudiendo por error. Tiene 7 goles en el 2025, pero este fue como encontrar el billete dorado de Willy Wonka: inolvidable y raro como perro verde. Bautista, con la banda roja tatuada en el corazón, sopló 19 velitas y como regalo, un gol de superclásico, ¡qué fino el destino con este joven de Balcarce!

¡Qué maravilla de zurdazo cruzado al estilo “Driussi on ice”! Como un sabueso rastreador de goles, Bautista pescó un pase de Lencina y pegó un chute que dejó al arquero de Boca buscando sus guantes entre las gradas. ¡Y qué celebración! Como si hubiera ganado el Mundial de los cumpleaños, evocó sus días de pichón en el club. Su familia en la tribuna y Placente de testigo, podría pensarse que hasta los trapos sucios estaban allí para ver el espectáculo.

Dadin es el caramelo de los técnicos, ¡con sabor a más! Mientras Marcelo Gallardo le observa con un catalejo de pirata, el pibe sigue soñando con alcanzar Primera, sin perder de vista su meta como si fuera un GPS roto en el lomo de un correcaminos. Con cada gol y pase, está a un paso de una cita histórica; la Reserva vibra con cada toque de este genio que hace que hasta los balones quieran bailar con la hinchada. ¡El superclásico de Reserva se convirtió en una fiesta de ventas multiplicadas por mil!