¡Montiel agarra la pelota solo para ver el drama!…

En el Monumental desierto, con un silencio que daba para escuchar el eco del zumbido de un mosquito, Gonzalo “Cachete” Montiel se preparaba para ejecutar un penal más afilado que un tenedor de plástico. Pero ahí llegó Sebastián Driussi, como quien le arrebata los últimos fideos a un amigo hambriento, pidiendo la pelota con ojos del Gato con Botas y una promesa de gol para ganar confianza. Resultado: el arquero Contreras save que ni Oliver Atom en sus buenos tiempos. ¡El penal salió más dirigido que una tortuga haciendo marcha atrás!

Como si fuese una comedia de enredos, no es la primera vez que Montiel ve cómo le sacan el penal de las manos para acabar con un chascarro de película de domingo a la tarde. Hace no mucho, fue Borja quien le sisuó el balón para luego entregárselo al portero rival como si fuera un regalo de cumpleaños. ¡River colecciona penales fallidos como quien llena el álbum del Mundial, pero se queda con la figurita repetida del mismo arquero parando!

Driussi, héroe en el pasado y’ ficha carísima’ de regreso, está intentando romper su racha como si estuviera tratando de meter un gol con la hinchada invisible haciendo la ola. A pesar de que ha dado algunas pinceladas de talento más brillantes que el sol de mediodía, el gol sigue esquivándole como un gato a un charco. ¡Vamos Driussi, que los hinchas aún creen que hay carbón suficiente para encender la hoguera de los goles en tu regreso a River!