Di Carlo: Battle of the Banter…
Imaginate un partido digno de los Looney Tunes, con Bugs Bunny y el Pato Lucas paseando por el centro del campo. Así se siente el último duelo de hinchas entre River y Boca en el Mundial de Clubes. Stéfano Di Carlo, secretario general de River, con el micrófono en mano y una sonrisa picante, decidió tirar sus dos centavos en el debate: “El viaje a Seattle fue más destructivo que perder las chanclas en una playa de Miami”.
Y es que, en un giro inesperado del guion, River y Boca se disputaron el trofeo de “¿Quién junta más hinchas en el extranjero?”. Los fanáticos del Millonario viajaron a Seattle, lugar tan remoto que podría ser el escenario perfecto para descubrir al Yeti. Di Carlo, maestro en la alabanza propia, recordó: “Llevamos 40 mil al fin del mundo, a casi besarse con Canadá y Asia al mismo tiempo”. Sin embargo, Miami, con argentinos más densos que las empanadas de la abuela, albergó a Boca; claro, solo había que cruzar el charquito.
Di Carlo, con la camiseta de River puesta y enredado en banderas rojas y blancas, hizo una última jugada maestra: “Si en Miami nos hubieran organizado algo, hubiéramos hecho un carnaval futbolístico en la arena, con 100 mil fans gritando ‘¡Vamos River!'”. La apuesta sigue abierta y lo único seguro es que este partido de fanáticos seguirá sacando declaraciones más jugosas que asado del domingo.