Un misil teledirigido al ángulo y Cozzani en la luna…
Marcelo Gallardo, en un arrebato de brillante locura futbolística, decidió sorprender a todos ubicando al titán del área Facundo Colidio por la izquierda y probando a Maxi Salas como centrodelantero. ¡Vaya plan maestro, Napoleón del fútbol! En menos de lo que canta un gallo, Colidio le pidió prestada la lámpara a Aladino Díaz, iluminó el Monumental y sacó un zapatazo astronómico que aterrizó en el ángulo de un confundido Cozzani, quien volaba como Superman pero con licencia vencida.
Este gol no fue solo un capricho artístico de Colidio, sino que al parecer le está tomando el gusto a esto de decorar arcos contrarios con pelotas en el ángulo. Es su octavo gol del año, y aun cuando el Flamengo trató de seducirlo a lo Tamara Bella con un contrato multimillonario, el amado Facu permanece firme como un rascacielos millonario. ¡Hasta el gato del estadio quedó anonadado! Con un Mundial de Clubes de leyenda en el bolsillo y toneladas de confianza, defienda su territorio ante la llegada de Salas y el regreso paulatino de Driussi.
Y como si hacer un gol descomunal no fuera suficiente, Colidio se vistió de croupier en el casino del área platense para repartir un pase de primera a Maxi Salas, ex Racing y ahora debutante anotador del equipo de la banda roja. Resultado: primer gol oficial para Salas y resplandor eterno para River en el Clausura. El cosmos futonero ha sido ordenado, por ahora.