Boca y River tras el sueño loco…

¡Ah, el Mundial de Clubes! ¡Ese torneo que parece un videojuego de fútbol mezclado con una telenovela mexicana! Desde el lunes hasta el jueves, los equipos están más nerviosos que perro en cancha de bocas. ¡Todos quieren clasificarse, todos sueñan con ese trofeo que brilla más que un asado a las brasas!

Boca, el equipo de Russo, está en una situación que es como un capítulo de “Los Tres Chiflados”: necesita golear al Auckland mientras reza que el Bayern Munich le pase el rolo al pobre Benfica. Y, como premio gordo, si pasa, ¡pumba! Se enfrenta a Flamengo, un equipo sudamericano más ferviente que un seguidor de Maradona en Las Vegas. Pero cuidado, porque si siguen soñando, se pueden topar en cuartos con el PSG y sus estrellas más brillantes que un arbolito de Navidad.

River, por otra parte, está en una encrucijada más complicada que tratar de entender por qué los hinchas llevan paraguas al Monumental cuando no llueve. Si logra aguantar contra el Inter de Italia y el Rayados se queda cortito, su destino es una mezcla de samba y cerveza, porque se enfrenta con el segundo de un grupo que parece concurso de bandas de rock: Fluminense, Dortmund y Mamelodi Sundowns. Y si pasan, ¡cuidado! Les espera un gigante, ya sea el Real Madrid, el Manchester City o la Juventus. ¡Que empiece el espectáculo!