¡La presentación del siglo en redes!…
¡Llame ya! Franco Mastantuono es la nueva estrella del Real Madrid, pero más que un fichaje parece un lanzamiento mundial del último modelo de smartphone. En el horario perfecto para el cafecito del desayuno porteño, el equipo blanco activó la artillería pesada y disparó un posteo a Instagram como si estuvieran anunciando el descubrimiento del Santo Grial. El tejemaneje de redes fue tan efectivo que en minutos Franco pasó de ser el pibe de barrio a tener más seguidores que la vez que mi tía Martha ganó la rifa del bingo del barrio.
¡Pero esperen! Como en todo sketch de humor, aquí viene el giro inesperado: para que no quede duda de que este es el pase más épico desde que Derby compró a la Burra Claus, el Madrid y Mastantuono se mandaron un post colaborativo que hizo temblar el wifi mundial. Todo ocurrió con tal despliegue que las redes parecían una final de Champions. Y el muchacho, que ahora suma fans más rápido que el crecimiento del césped en la cancha de Talleres, ya ocupa el centro del escenario merengue.
En apenas cinco horas, el cronómetro de seguidores del buen Franco reventó, sumando 200.000 almas como si sorteara el auto de Don Pipo. Y con una cláusula de rescisión que te hace pensar dos veces antes de romper la alcancía (¡1.000 millones de euros!), este muchachito de 17 primaveras llega como la nena mimada de la galaxia Madridista. Así que, amigos, prepárense, porque Franco Mastantuono no solo tiene un caño en los pies, ¡también maneja las redes sociales como un Messi digital!
