Alta médica: El Loco vuelve al ruedo…

Carlos Enrique, alias ‘El Loco’, salió del hospital a ritmo de carnaval, como si acabara de anotar un gol decisivo en el último minuto. Encima, vestido de gala con la camiseta de la Selección Argentina, agradeció cual estrella de Hollywood en los premios Óscar: “Me tengo que cuidar, me tengo que cuidar”, repetía como mantra. Y claro, después de un infarto que hizo más ruido que un partido de Boca-River, no es para menos.

La hazaña médica que salvó al Loco incluyó un par de stents, esos artefactos que uno pensaría ideales para un auto de Fórmula 1, ¡pero no! Fueron para el mismísimo Carlos, quien, con más vidas que un personaje de videojuego, agradeció a medio planeta con más emoción que un relator en penales decisivos. Si llegaron saludos de Júpiter, seguro nadie se enteró.

En su reinvención como guerrero sobreviviente, el ex jugador de River y campeón de la Copa América 1991, promete cuidarse, aunque siendo El Loco, uno puede imaginar que eso significa ir a entrenar como si fuera Rocky Balboa. Pero no en la nieve, ¡sino en plena Bombonera! Se comenta que incluso lanzó un “¡Bendiciones!” que resonó hasta en los pasillos de su carrera futbolística. ¡Grande, Loco! ¡Seguimos alentándote desde el tablón de la vida!