Marcelo Gallardo y la ópera bufa del mercado de pases…
En esta comedia del mercado de pases, Marcelo Gallardo, el mago Merlín de River, con la varita mágica en mano, se anima a desafiar a todos y cada uno de los hechiceros del fútbol argentino. “Las opiniones externas me importan menos que los memes sobre mi peinado”, exclamó el Muñeco, mientras Maxi Salas, el flamante fichaje de River, anotaba un gol digno de Chapulín Colorado en su debut contra Platense. ¿Qué más se puede pedir? ¡Un balón para Gallardo mientras escapa en monociclo de Racing y Estudiantes, de paso bailando un tango sobre la cancha para provocar a los críticos!
La novela de invierno habría hecho palidecer a quienes querían ser actores hace años: Stefano Di Carlo y Diego Milito estaban preocupados por la actuación de River, pero Gallardo, con más calma que un yogui, optó por fijarse en el poder de las palabras de Salas directamente en Instagram. Resulta que la palabra ‘importancia’ no se juega en la cancha, pero en los pasillos del Monumental, era más jugada que un amague de Messi.
No todo es miel sobre hojuelas, claro. El estratega también anunció que vendría Juanfer Quintero, pero solo si era posible encontrarlo en un álbum de figuritas perdidas. Además, haciendo las veces de anfitrión, comunicó a varios jugadores que la fiesta se acababa y era hora de buscar nuevos boliches… ¡más allá de que algunos aún no entendían en qué día de la semana vivían! Un equipo renovado, a lo glamour de los Avengers que cambia alineación como quien cambia de canal. Y así, el Muneco Gallardo, coleccionista de energías ‘feng-shui’, busca equilibrar su plantel y enfrentarse a la temporada como un Picasso del balón, perfecto en cada pincelada de su obra maestra.
