Galarza: el Droopy incansable del nuevo River…
¡Que se preparen los mecánicos de la Fórmula 1 porque tienen competencia nueva! Marcelo Gallardo encontró en Hernán Galarza el motor que el River 2.0 necesitaba. Este paraguayo, más rápido que la Liebre mecánica, ha revolucionado el mediocampo con su resistencia inagotable. Dicen que Pablo Guiñazú, ex entrenador y ahora vocero de Galarza Motors, aseguró que este pibe corre más que un rumor en pasillo de secundaria. Con apenas dos entrenamientos, el muchacho ya rugía en la cancha, listo para hacer historia y escribir su propia telenovela futbolera.
Galarza, el Modric de Asunción pero sin tanto ruido, ha demostrado que no le pesa la camiseta millonaria, ni el eco de las tribunas. Con más pulmones que una orquesta de saxofonistas, cautivó a los hinchas. No llegó ni con bombos ni platillos, pero parece que sus pies traían un amplificador. ¡Carlos Sánchez y Nicolás de la Cruz ahora tienen sucesor en la línea de producción de energizantes futbolísticos!
Si Gallardo quería una nave espacial para sus nuevas aventuras galácticas, Galarza es la respuesta. A sus tiernos 23, después de pisar gramados de todo tipo desde Olimpia hasta Coritiba, parece estar listo para explotar en el firmamento. Sus primeros 171 minutos con casi la velocidad de la luz en el pecho del CARP, lo demuestran. Este Droopy moderno promete seguir corriendo, porque parece que Galarza vino con batería de cargar solar. ¡A inflar las velas, que este barco no se detiene!
