El Muñeco en busca del menú ganador…
¡Ay, Muñeco! Parece que River últimamente tiene tanto apetito como un tiburón vegetariano de Disney. Entramos en terrenos peligrosos, esos donde el público pide goles como si fueran papas fritas: siempre más de las que se les sirve. Después de perder contra Talleres, el hombre del mate y la táctica se enfrenta a una presión tan grande como la hinchada millonaria.
Los cambios son inevitables, pero, ¿serán efectivos? Gallardo no quiere eliminar el toque agresivo de su River, pero posiblemente se vea obligado a cambiar actores en esta novela roja y blanca. Ya se ha visto que algunos jugadores parecen extras en la historia y el Muñeco podría buscar un reparto juvenil más ágil. Eso sí, busca evitar que se convierta en un culebrón mexicano.
Con la Libertadores a la vuelta de la esquina, Gallardo sabe que el tiempo corre como una cuenta regresiva en el microondas. Su objetivo es lograr que el equipo despierte su hambre por los títulos antes de enfrentarse a grandes desafíos. El Muñeco está dispuesto a hacer el menú a medida para que River recupere su viejo apetito por el gol. ¡A ajustarse los cintos, que este tren está por arrancar!