Ríos de comentarios en su Instagram…
¡La pelota y el celular en el corazón! Aún no había pasado ni media hora desde que Franco Mastantuono había hecho una obra de arte en la Bombonera, que ya su Instagram parecía el tablón de anuncios de la curiosidad. ¿Y qué fue lo más surrealista? Ver a toda la high society futbolística rendida a sus pies como si fueran subcampeones del mundo en gimnasia rítmica. ¡Había más “animales” comentando que en un documental de National Geographic!
Una de las perlitas vino de Sebastián Driussi, que subrepticiamente se transformó en compositor de Las Pastillas del Abuelo, soltando un comentario que sólo se oyó dos veces: la primera, inspirada por el gol de Franco; y la segunda, escrita en el dorso de un ticket del supermercado. Manu Lanzini también le echó un “jugate algo, animal”, demostrando que al crack de River le falta invitación para volver al barrio con una bota de vino y un naipe. Está claro que cuando la pasión futbolera habla, los goles no son lo único impactante.
Y mientras los europeos ya preparan la plata para llevárselo, Gonzalo Montiel y Marcos Acuña le dejan mensajes que son una mezcla de WhatsApp de tía cariñosa y diálogo de película de acción: “Vestite, pibe”. Todo esto mientras Ramiro Funes Mori le otorga su bendición personal recordando aquellos tiempos cuando convirtió en la Bombonera y el gol quedó flotando en el aire como el aroma de un buen asado. ¿Esto sólo pasa en River o es que el planeta se alineó para Mastantuono? ¡Que nunca se levante del suelo ese pibe!
