Franco Mastantuono y la travesía a lo Indiana Jones…
Con apenas 18 abriles en el calendario, Franco Mastantuono se embarca en una aventura más épica que atravesar un océano en bote de remos, rumbo al universo galáctico del Real Madrid. Con un pasaporte en una mano y un mate en la otra, deja atrás la calidez de River, justo como si fuera un superhéroe que abandona su barrio natal para conquistar otra galaxia. “Hacer el mismo camino que Don Alfredo es un orgullo para quien nació en River”, comentó Franco, mientras acariciaba una pelota de fútbol como si fuera un cachorro regordete. Esa joya de frase ya está en la tapa de Marca, como si fuera una foto de un platillo volador sobrevolando el Bernabéu.
El legado de Alfredo Di Stéfano es tan vasto como la colección de pecheras de entrenamiento en un club de barrio. El legendario Alfredo acumuló más títulos que un librero de barrio, y ahora Franco busca llenar esos botines. Será el decimocuarto gladiador de River en llegar al Real Madrid, uniéndose a un elenco que podría formar un equipo de superhéroes capaz de salvar el universo del balompié con un único gol.
Franco, manteniendo la calma a lo Buda en un sauna, juega al tenis en Azul mientras espera su ovación en el Estadio Santiago Bernabéu. ¡Hasta hace su equipaje con más técnica que un control del VAR! En una charla informal, realizada mientras batía un récord de comer empanadas en su ciudad natal, agradeció a los hinchas riverplatenses por el afecto recibido en su despedida. Como en una telenovela, dejó entrever la pasión y emoción de su decisión en una carta más larga que un entretiempo en la Bombonera. Ahora, el joven prodigio, lleno de adrenalina y quilates, está listo para emprender la misión “Galáctico Teenager”, llevando en su valija ilusión, talento y un par de medias de la suerte.
