Villar se rinde a los pies del pibe volador…

¡Agárrense de sus sillas, amigos del fútbol! Imaginen a un pibe de 17 años corriendo por la cancha con la gracia de una gacela y la velocidad de un cometa Halley, eso es Franco Mastantuono en acción. En el apasionante duelo entre River e Independiente del Valle por la Copa Libertadores, el joven dejó boquiabiertos a todos cuando recibió un penal como si de un truco de Harry Potter se tratara: hizo desaparecer y re-aparecer al defensor Carabajal, quien terminó en la ducha antes de tiempo.

Guido Villar, el arquero del equipo ecuatoriano, bien podría ser otro espectador más al ver al pibe “en el aire”, como él mismo dijo. “Me agarró abierto y, si iba, llegaba tarde”, expresó aludiendo a la habilidad deslumbraestrellas del joven prodigio. El partido dio un giro más rápido que un trompo en una calesita, cuando el crack de River estiró la ventaja y se convirtió en una pieza estrella del Monumental.

Con estadísticas que hacen temblar a cualquier robot, Mastantuono consiguió un 90% de pases precisos, como quien saca un 10 en un examen y ni siquiera estudia. Cuatro duelos ganados, cuatro centros, y pases mágicos para coronar una noche épica que recordó más a un espectáculo de magia que a un partido de fútbol. ¡Viva el pibe volador que nos llevó a octavos de final!