El Diablito patina entre estrellas europeas…

En una epopeya digna de los cuentos de ciencia ficción, Claudio Echeverri, conocido en el mundo del balompié como “El Diablito”, ha cruzado el Atlántico en una balsa de sueños y talento futbolístico para entrenar con las constelaciones galácticas del Manchester City. El muchachito de 19 años, famoso por sus gambetas que resucitan hasta al pasto quemado del potrero, entrena junto a megastars como Kevin De Bruyne, más brillante que el ornitorrinco de la fábula, y el siempre simpático Erling Haaland, que corre más rápido que un rayo en camiseta de flamenco.

Aunque el Diablito aún no ha lucido oficialmente los botines en césped inglés, se le ha visto haciendo malabares en el entrenamiento, dejándose caer en los brazos de sus nuevos compinches, Phil Foden entre ellos, quien lo recibió como si fuera el nuevo Messi perdido en la nebula del fútbol. Mientras tanto, Pep Guardiola asegura que el joven puede convertirse en un Jedi del fútbol, aunque por ahora le forja su espada láser de habilidades y lo cuida como a una planta carnívora en el balcón.

Mientras tanto, en Núñez, River se hace rico con monedas menos doradas que las medallas vikingas. 18,5 millones de euros volaron al tesoro millonario por el pase de Echeverri, y el pacto incluye unos millones danzarines que se activarán cuando el joven prodigio se robe el show en las canchas. ¿Será que lo veremos enfrentando a fuerzas tan indomables como el Wydad o, quién sabe, desempolvando su magia en un Mundial de Clubes al estilo película de aventuras? ¡Apretamos el cinturón! Porque este viaje va a ser una montaña rusa.