Monterrey se perfila hacia la gloria con Torrent al timón…

Si creías que los Rayados eran un equipo de fútbol y no una receta de cocina, prepárate para cambiar de opinión. Con Torrent Font al mando, este grupo se está cocinando a fuego lento, añadiendo una pizca de estilo español y un toque picante de salsa regiomontana. En el primer amistoso, después de la revolución Demichelis, le dieron una sopa de su propio chocolate a los Xolos de Tijuana, ganando 3-2 en un choque que parecía más alquimia que fútbol.

El partido, que se jugó en tres tiempos de 30 minutos, fue más complicado que armar un mueble de Ikea sin instrucciones. Nuestro querido Sergio Ramos no participó, pero estuvo allí, como un granadero español perdido en una revolución mexicana, observando con su mirada de toro de lidia. Mientras tanto, Roberto de la Rosa se transformó en una versión mejorada de ‘El Chapo’ del área, anotando un doblete que hizo que hasta el pasto del estadio quisiera aplaudir.

El legendario Ramos, quien está regresando de su retiro espiritual futbolístico, ha vuelto a las prácticas y el equipo lo espera como si fuera el regalo de cumpleaños que ya olfateaste en el armario de tus viejos. Con Canales como motor, De la Rosa tocando el violín de los goles y Ramos acercándose al ruedo, Rayados sueña con escribir una nueva saga épica en el Mundial de Clubes. Porque, como diría un clásico: “En este juego no solo jugamos al fútbol, jugamos a ser legendas”.