El Salas-gate y la guerra de Milito…
Se viene una batalla de titanes que haría sonrojar a cualquier productor de cine de acción. Imaginate a River y Racing en el ring, con Maxi Salas escapándose como ladrón de historieta y Diego Milito lanzando misiles verbales a la dirigencia de River y a Gallardo. Este clásico promete ser más sabroso que un choripán en una final de verano, pero, gracias a los caprichos del calendario, queda más indeterminado que el horario de llegada del 60 en hora pico.
Para presenciar este espectáculo digno de una novela de espías, los astros deben alinearse: un cruce en playoffs, un encontronazo divino en la Libertadores o una escaramuza por la Copa Argentina. Si esto fuera una partida de ajedrez, las finales se jugarían en Rose Rossepalm-wood, pero como estamos en el mundo real, es el Cilindro el que promete fundirse en calentura.
Mientras ambos equipos juegan al Tetris con sus calendarios y esquemas, las palabras de Milito resonaron como un eco en la cancha: “Los sapos a River no me los como solo”, declaró. ¿Quién necesita series de televisión o libros de misterio cuando tenés a dos gigantes del fútbol creando suspenso en tiempo real? Ajustate el cinturón y preparate para el clásico que no duerme.
