Montiel desgarrado y MQ con amarilla…

En el barrio de Núñez, las sonrisas iluminarían un apagón eléctrico: el golazo de Mastantuono todavía se ve en los televisores como si fuera la final del Mundial. Pero mientras algunos peinan sus pelucas al viento y buscan nuevas cornetas, el ‘Muñeco’ Gallardo se calza la lupa más grande que encontró para ver cómo remienda la defensa en el próximo partido contra Vélez. Parece que los defensores de River están más difíciles de encontrar que un taxi en plena tormenta con piquete incluido: Montiel está desgarrado como la camiseta de un hincha después del clásico, y Martínez Quarta sumó tantas amarillas que terminó tarjeteado como una promoción de supermercado.

Lo de Martínez Quarta fue algo así como una película de acción: jugó en ‘capilla’ y, cual torero rusa, regateó las amonestaciones hasta el último Boca-River. Justo cuando pensaba que iba a salir indemne, ¡zas!, a los 28 minutos del segundo tiempo lo amonestan y le toca un descanso obligatorio. ¡Por lo menos podrá broncearse con ganas de bajar de las alturas en su próximo intento de despeje! Mientras tanto, el chileno Paulo Díaz podría estrenarse si sus isquiotibiales no deciden organizar una huelga justo ahora.

¿Y los refuerzos? Parece que hay una reunión de otros viejos conocidos: Germán Pezzella, alias ‘error fatídico’, también podría salir a escena. Y si todo sale mal, se podría abrir la caja de sorpresas de Leandro González Pirez. Del otro lado de la cancha, el “Pity” Martínez está viendo si la pierna se le convierte en un filete o si logrará volver sano. Galoppo, en cambio, parece más un vendedor de hielo que un jugador después del partido contra Boca. ¡Lo bueno es que al menos no quedaron hechos un pingüino para el duelo con Vélez!