El Maestro Gallardo y su ejército de casi-gol…
¡Atención, señoras y señores! Bienvenidos al mágico mundo de River Plate, donde los muchachos del gran Gallardo logran proezas increíblemente absurdas en la cancha. Imaginate a un cocinero preparando un banquete de asteroide y al final… ¡quemando la sopa! Así es River, dominando con una elegancia que hace llorar de envidia a cualquier ballet, pero al llegar al arco, parecen cerrar los ojos. En lugar de goles, tropezamos con una estadística que hace reír hasta al más serio: ¡han fallado 26 de las 33 ocasiones claras!
Los hinchas ya no saben si comprar una calculadora o un terapista, porque los números son tan disparatados que se podrían usar como guion de una película de ciencia ficción. Con un 67% de posesión, River debería estar en Marte, no en la tabla 17º de goleadores, con apenas 12 goles en 13 partitotes. Este equipo es el Messi del Picasso del fútbol… ¡pero al revés! Antes eran unos artistas en el gol, y ahora sus artilleros solo pintan murales de “casi-gol” en las nubes.
Y si esto parece un cuento imposible, chequeá los años anteriores, cuando River era el terror de las redes en el ámbito local. Y no es que se olvidaron de cómo se meten los goles; sólo están en una búsqueda artística por combinar el teatro del absurdo con el fútbol. ¿Estamos ante un plan secreto para atraer patrocinadores del Cirque du Soleil? Solo el tiempo lo dirá. Hasta entonces, abrazamos esta tragicomedia al estilo River Plate.