La Montaña Rusa de Altura vs Independiente del Valle…

Imagínense a River como un turista desprevenido, sin bloqueador solar en la cima del Everest. Este miércoles, el equipo del Muñeco enfrenta un desafío de altura en Quito, donde el aire es tan escaso que hasta las pelotas de fútbol piden oxígeno. Con 2.850 metros sobre el nivel del mar, la táctica de River es llegar al estadio como quien va a un asado: sobre la hora, para que los efectos los sientan cuando ya estén en pleno partido. !La estrategia del “llegué tarde al asalto” nunca falla!

La travesía de los Millo comienza en Guayaquil. El martes al mediodía, con el dineral que gastaron en repelente para mosquitos y sorbettos para respirar, el plantel hará escala antes de lanzarse de cabeza al aire de Quito que más parece un cemento invisible. Gallardo y su banda aterrizarán casi con el silbato inicial del árbitro, practicando una coreografía aérea que haría palidecer a los patos en V.

Sin embargo, el rival está invicto en su fortaleza, como Dragón en cueva: lleva 13 partidos sin perder. Entonces, la cuestión es clara: no solo luchan contra los efectos de la gravedad y del aire fino, sino también contra un equipo que se siente más fuerte que un guiso en pleno invierno. ¡Vamos River! Que esta vez el Everest es apenas otro obstáculo en el sendero a la gloria futbolera.