Fútbol, Trump y migración: la combinación explosiva…
¡Atención, amigos del balón! Mientras todos esperaban con ansiedad el Mundial de Clubes, en tierras yanquis no solo el fútbol es protagonista. La flamante administración de Transformers pero en versión política, encabezada por Donald Trump, desató su versión más bélica con una nueva ley migratoria que causó el caos más grande después de buscar los partidos de la Superliga a las 3 am. Con manifestaciones dignas de una final de Libertadores Intercontinental, los latinos decidieron cambiar las tribunas por las calles. Y allí van, con las camisetas bien puestas, enfrentándose a la Guardia Nacional como si fueran a ganar la Copa del Mundo.
¿Y el fútbol? ¡Ni los pixeles del FIFA se salvan de este lío! Mientras los hinchas piensan más en usar las entradas como pancartas que como tickets, los partidos parecen transcurrir como un entrenamiento de pretemporada en enero. De hecho, al partido inicial ¡hay tantas entradas a la venta como lentes llevan los turistas a la Casa Blanca! Los hinchas de River están más confundidos que Gallardo viendo el VAR por primera vez, y en Pasadena, los manifestantes gritan más fuerte que los altoparlantes del estadio.
Los partidos del River parecen estar en un Mundial alternativo creado por los genios de Hollywood. Los Ángeles, convertido en un set de películas de acción, será testigo de cómo el equipo de Gallardo disputa la pelota con Monterrey en medio del caos. A este paso, no quedan muchas dudas de que el mundial de Clubes es solo ese extraño momento en el que todos se preguntan ¿se juega al fútbol o se filma otra versión de ‘Día de la Independencia’?
