Remodelación Millonaria en Núñez…
Mientras la eliminación del Mundial de Clubes sigue doliendo como un fernet caliente en pleno enero, el universo River sacude la pelusa y comienza a planear su retorno triunfal. Gallardo, quien se transformó en director técnico, carpintero y fontanero, tiene dos semanas para convertir un grupo de jugadores en una máquina de ensueño.
El intrépido Franco Mastantuono abandonará el nido como un superhéroe fichado por el Real Madrid, dejando al equipo más desconsolado que una milanesa sin limón. Claro que Gallardo no va a quedarse de brazos cruzados: para reemplazar a su joyita, negocia fichar a Maxi Salas, un delantero que vuela por la cancha más rápido que un delivery con doble pedido de fugazzeta.
Entre malabares de circo, charlas a lo vodevil y un ojo en Libertadores, River busca fortalecer su escuadra. Pero los desafíos no acaban ahí: en el horizonte, Platense aguarda ansioso un partido en el Monumental, y si no fuera poco, un San Martín de Tucumán amenazante asoma por la Copa Argentina. ¡El Muñeco tiene más trabajo que el panadero de la Selección durante el Mundial de 1998!