Chiqui Tapia y el regreso locochón de los visitantes…

¡Atención, damas y caballeros del fútbol argentino, porque el Chiqui Tapia ha lanzado una noticia explosiva que podría ser el nuevo programa de sábado por la noche! Ahora cada club puede decidir si quiere hinchas visitantes en su cancha. Como si fuera la feria del barrio, algunos quioscos futboleros se animarán a abrir las puertas de sus estadios a la hinchada rival, mientras que otros se aferrarán a sus entradas como si fuesen la última empanada de la fiesta. La primera prueba alocada será entre Lanús y Rosario Central, donde se espera que los dos grupos de hinchas armen un carnaval tan colorido que el desfile de Gualeguaychú se quede corto.

El Xeneize, por otro lado, parece estar más apretado que un colectivo en hora pico. En La Bombonera, donde la segunda bandeja es tan codiciada como la última porción de pizza, han decidido que al menos hasta el 2026 no van a compartir el cotizado espacio con los visitantes. ¿La razón? Preferirían dejar esas ubicaciones para sus propios hinchas, algo así como reservar las mejores sillas de la casa para la familia en Navidad. ¡Eso sí, le mandan un guiño a todos diciendo que no es por mala onda!

Desde el Monumental, River es como aquel vecino que se acostumbra tanto a comer en bata que ya ni se interesa en comprar vajilla para las visitas. ¡La cosa es que al Millo le gusta ver la tribuna llena de rojiblancos! Los hinchas han llenado el estadio más veces que la panadería del barrio en víspera de fiestas, así que han dicho “¿para qué cambiar algo que ya funciona?”. Mientras tanto, el Ciclón, la Acadé y el Rojo están como en una novela turca: ¡no saben si decir ‘te quiero’ o ‘mejor otro día’ a los visitantes!