Nacho Fernández y su partido legendario…
En una noche más mojada que un sapo en chapuzón, River Plate destrozó a Vélez 4-1 como si estuviera en clase de cocina aplastando papas. El Monumental, que parecía una manguera desenfrenada, fue testigo de que Nacho Fernández decidió recobrar las habilidades ninja del 2018-19 y se convirtió en una especie de Messi renacido, anotando golazos que harían llorar de emoción a un botín suelto.
Nacho, el héroe de mil batallas, terminó el partido más acalambrado que un viejo televisor con antena defectuosa. Pero ni eso lo detuvo. El tipo seguía corriendo como un caballo desbocado, marcando y haciendo pases dignos de un mago con chasquido de dedos. Los hinchas, armados con paraguas y bufandas, se la pasaron aplaudiendo como si estuvieran en el estreno de una película de superhéroes, saludando al nuevo ídolo del barrilete cósmico de Núñez.
Y ahora el equipo de Gallardo, con más viento en la camiseta que un papalote en primavera, se prepara para enfrentar al mismísimo Barracas Central. Será un partido épico, digno de una telenovela, con drama, suspenso ¡y quién sabe! Quizá otro golazo de Nacho que haga que incluso las nubes paren de llover para aplaudir.
