Hinchas entre llantos y carcajadas…

¡Ay, River, qué montaña rusa, hermano! En la primera mitad de 2025, los hinchas pasaron más emociones que una bolsa de gatos en una lavadora. Si el Lunes caías al super, el Martes ganabas contra Boca, el Miércoles celebrabas como loco un fichaje caro y el Jueves la crisis existencial del Apertura te cruzaba la cara como bofetada de abuela enojada. ¡Y todo con Gallardo guiñando un ojo como director de orquesta rebelde!

El 50% de los sufridos hinchas calificaron el semestre como regular, como esa pizza de ananá que jamás debió existir. Un 21% dijo que fue peor que un penal fallado en un mundial y el 10% prefería ver el Titanic hundirse tres veces seguidas. Sin embargo, un puñado optimista elevó los pulgares al cielo, convencidos de que la película de River era mejor con un poco de picante. Entre goles, mercado de pases con nombres dignos de un Hall of Fame y partidos que parecían peras escarchadas, las emociones quedaron al rojo vivo.

La esperanza, igual, la lleva la banda roja, cual héroe de novela romántica en busca de su final feliz. Aunque al equipo le toque bailar con la más estricta, las hazañas de Mastantuono deslizando gambetas prometen un regreso por todo lo alto. Entre festejos, lágrimas y alguno que otro silbido, la fiel hinchada millonaria sigue esperando el gran golpe de mesa. ¿El sueño? ¡Romper la cinta y llegar al Mundial de Clubes bailando en una zamba de goles y que Gallardo cierre el año entre paellas y tango!