Enfrentamiento explosivo en el Madre de Ciudades…
¡Atención señores y señoras del fútbol criollo! Esta noche, River se juega no solo la Copa Argentina, sino también el título de los expectativas frustradas. En un estadio Madre de Ciudades que promete más misterio que una telenovela de las 10, el equipo del grandioso Marcelo Gallardo, alias ‘el maestro de los mata-mata’, se enfrenta a San Martín de Tucumán, un equipo que juega como si cada partido valiera un Happy Meal de McDonald’s.
El Santo tucumano, liderado por Mariano Campodónico, llega con el entusiasmo de un niño en una tienda de caramelos y la astucia de un zorro con GPS, a ver si le da un susto al presupueto gigante de River, que últimamente tiene el valor defensivo de una canasta rota. Dado el historial riverplatense reciente de eliminarse más rápido que un deseo de año nuevo, este partido podría ser la chispa que encienda el que supuestamente es el espíritu copero, que lleva tanto tiempo dormido, ¡que está en riesgo de olvido!
Para Gallardo, cada jugada será como cocinar un omelette sin romper huevos, porque a tan solo dos semanas de enfrentar al Heavy Metal Team, Libertad de Asunción en la Libertadores, la alineación es más un enigma que el crucigrama de domingo. Los fanáticos esperan que este sábado vuelva aquella mística de un River irresistible y, quién sabe, capaz de corregir el rumbo para separarse de su eterno rival, Boca, que en los 16avos fue aplastado por ATU como si fuese una mosca en un parabrisas. ¡Tucu y voy, diría cualquier locutor emocionado!
