Gallardo, el feliz comprador compulsivo…

Parece que a River le picó el bichito del gasto y, sin miedo al éxito, decidió ponerse en modo “el que gasta más, también sonríe más”. Con la llegada de Kevin Castaño, el club alcanzó unos asombrosos 53 millones de dólares invertidos desde que Gallardo volvió al club. Un poco como comprar todo el supermercado, pero en términos futbolísticos.

Kevin llegó directo de Rusia, donde la única competencia que tuvo fue el frío siberiano, y firmó con River una historia de amor futbolístico de cuatro años. Por casi 14 millones de dólares, River sumó a este volante colombiano de 24 años, que más que un bombero es la esperanza de todo un mediocampo. Ahora, el Muñeco Gallardo se pasea por el Camp Monumental, tan contento como cuando encuentra un caramelo en el bolsillo.

Los movimientos en el mercado de fichajes le permiten a Gallardo jugar al Tetris con el plantel a gusto. A lo largo de 71 días, River no escatimó en gastos, comprando refuerzos como si fueran oferta del día. Claro, todo mientras los rivales se secan las lágrimas con 25 millones invertidos. Eso sí, la expectativa es casi tan alta como el presupuesto. ¡A ver si la cancha también sonríe!