Un joven fenómeno que deja boquiabiertos a todos…
Imaginate tener 17 años y que te pongan una cláusula como si fueras la versión futbolera de un tesoro de piratas: ¡30 millones de euros! Eso es lo que pasó con Santino Giletti, el joven mago de la pelota que River ya blindó como si fuera la boca del tesoro en una isla desierta. Este fin de semana decidió que no venía solo a firmar autógrafos, así que, como quien prepara un mate para el Diego, deslumbró a todos con un golazo ante Racing.
Santino, que es más escurridizo que una ardilla con botines nuevos, desarmó a los defensores rivales con un enganche tan elegante que hasta Fred Astaire hubiera envidiado su paso de baile. La bola terminó entrando al ángulo sin que el arquero rival pudiera más que volar al vacío, como un pájaro que busca el arco iris. Dicen las malas lenguas que el Tita Matiussi todavía retumba con los “ohh” de la tribuna.
La historia de Santino empieza en Tigre, donde el pibe ya mostraba que en su ADN había más goles que en un partido de metegol. Se unió a River y desde entonces está encendido como un parrillero en pleno asado del domingo: cuatro goles en once partidos. A ver, tené cuidado Scaloni, que este pibe puede tener más gambetas que un “picado” en la Costanera. ¡Grande Santino, la joya del CARP!