El show de las bolillas y los rivales sorpresa…

¡Señoras y señores, agárrense de sus asientos porque este lunes el universo futbolero entra en combustión! No es un partido, pero sí otro emocionante episodio del show de las bolillas voladoras con sus coreografías imposibles, en donde más de un fanático se comerá las uñas esperando el destino de su equipo. En Asunción, Paraguay, a la hora que el gallo canta (aunque el gallo ya está harto) a las 12 del mediodía, los elencos de River, Racing, Vélez y Estudiantes aguardan como chicos en Navidad qué rival les caerá de las bolillas mágicas. Es casi como elegir el relleno de un alfajor a ciegas; no sabés si te toca dulce de leche o mostaza.

Nuestros gladiadores argentinos están tan listos que ya tienen su armadura de supersticiones y cábalas puestas, rogando no toparse con los ogros del bombo 2: Flamengo y Botafogo. ¡Menuda amenaza se nos avecina sobre el horizonte! Botafogo, el último en alzar la Recopa con menos movilidad que un semáforo en rojo, y Flamengo, que es capaz de perder hasta con el portero del Central Córdoba y su escobillón. Dicen que en sus ratos libres practican el “casquito” y “el paredón” por si no alcanza con el fútbol.

Y ojo al piojo, porque esto no es un sorteo cualquiera. No señor. El Fixture se arma hasta la final, así que ya queremos ver a los hinchas con calculadora en mano y tachuela en el tablero de corcho, planeando hasta el año entrante. ¡Vamos argentinos! Que las bolillas del destino estén de nuestro lado (o al menos, del lado que asusta menos). ¡El sueño por la Gloria Eterna está en marcha, y el show sigue adelante!